Virgen del Agarradero...

Muchos de los Colombianos hijos de las viejas familias dedicadas a la arriería o a muchas artes agrícolas, hemos sido criados a punta de refranes populares para entender las cosas de una manera mas fácil, entiéndase por refranes populares, una especie de parábola de Jesús pero criolla, referente a la vivencia diaria y que no da lugar a las especulaciones, refranes como: más vale pájaro en mano, mas perdido que ..., el que a buen árbol se arrima y uno de mis preferidos: "Virgen del agarradero agárrame a mi primero"

Estoy casi seguro que usted nunca se ha detenido a analizar todos los entramados que tiene éste refrán, razón por la cual quiero compartir con ustedes mi reflexión católico-social que se desprende de esta frase.

Al utilizar una simbología femenina puede ser considerado "Machista", más aún, por utilizar no solo un ícono de la religión católica sino un término que se refiere a la sexualidad femenina, lo que al menos le asegura un Alto factor de recordación. 

El análisis socio comportamental del refrán concluye que fomenta la "solidaridad" entre hermanos, pensando que la mujer, que no ha iniciado su sexualidad, decida escogerme primero no por mis dotes masculinos sino por mi cobarde llamada de auxilio.

Finalmente y tras un intento por hacer un estado del arte sobre dónde queda el "agarradero" o cuál es el milagro de la mencionada virgen, para que sea tan invocada en Colombia, descubrí que el agarradero queda en lo más profundo de cada uno de nosotros los Colombianos, en donde de manera egoísta suplicamos siempre ser los primeros en todo.

Sugiero pues seguir invocando a tan aclamada figura no pidiendo el bien personal sino el bien nacional y empezar a decir "virgen del agarradero que la paz en la habana sea ligero"

Daniel Pedraza Isaza

Paquepaz@gmail.com

 

 

"Me siento indignado (a)"

Es difícil pensar que un país donde gran parte de sus ciudadanos ha vivido en medio del conflicto armado pueda, de un momento a otro lograr la paz. Aunque soy de aquellas optimistas que cree que esto es posible, con una sana convivencia entre sus ciudadanos donde el respeto por el otro y la tolerancia sean valores implícitos en cada acción, soy igualmente consciente que no es posible lograrlo de la noche a la mañana y mucho menos con la firma de un acuerdo en la Habana, claro está, que la dejación de las armas por parte de los actores armados es un aspecto fundamental para iniciar un verdadero proceso de paz aunque esto no es suficiente.

Desde que tengo uso de razón la política, el conflicto, la guerra, la paz e incluso el fútbol, siempre han sido temas de conversación en diversos ámbitos de mi vida con todas las pasiones y emociones que estos despiertan. Consciente de que el camino no es fácil, mucho menos en un día a día donde prima la ley  del más vivo, la mal llamada malicia indígena, la persistencia en hacer "trampita" por ahorrarnos unos pesos o un poco de tiempo, los torcidos, la corrupción política, la crisis social, la indiferencia ante el necesitado, donde nos acostumbramos a exigir mucho como ciudadanos pero a dar poco entre muchas otras cosas de las cuales podría hacer una lista interminable, estoy convencida que es un camino que debemos construirlo entre todos.

Como empezar a dejar atrás años donde lo inaceptable se convirtió en lo aceptable? como hacer que ese mismo patriotismo del que muchos se ufanan por ejemplo cuando clasificamos al mundial, o ganamos una medalla olímpica se traslade a acciones que ayuden a construir un mejor país para nuestros hijos?. Como se ha vuelto costumbre últimamente nos indignamos desde nuestras casas y en las redes sociales  por lo que sucede con nuestros campesinos, por el salario de los congresistas, por un conductor borracho, por los abusos de la policía, etc, etc.  El "me siento indignado" se convirtió en una moda que dura tan sólo unos días y continuamos desde nuestras casas sentados frente al televisor quedándonos con lo que nos dicen los noticieros y haciendo poco o nada para empezar a cambiar nuestra realidad. No obstante pasamos por alto que para indignarnos tenemos primero que pasar por ser dignos. Empecemos por hacer cada uno una reflexión y pensar si soy un ciudadano digno: ¿qué he hecho yo por mi país? ¿Cuál es mi aporte a la paz? ¿Qué puedo hacer? Nunca es tarde para empezar......

Si empezamos a convencernos de qué el cambio comienza por uno mismo, sería un buen inicio, colmando nuestros días de "pequeñas buenas acciones": siendo amable en todo momento, un saludo, un por favor y un gracias, ayudando a quien lo necesita, respetando las "filas", las señales de tránsito, presentándonos en las urnas, pagando cumplidamente nuestros impuestos (sin trampita), cuidando nuestros parques y calles, siendo honestos y respetuosos y demás actitudes y acciones que ayudan a  forjar un verdadero sentido de pertenencia, creo que con la sumatoria de esas pequeñas acciones estaremos más que aportando a la paz, la estaríamos construyendo entre todos y sería el mejor legado para nuestros hijos y las generaciones venideras. En ese momento seríamos un país digno de vivir en paz.

María Camila Franco Franco.

Paquepaz@gmail.com

¿Un país cuyos ciudadanos no saben hacer fila, está preparado para vivir en Paz?

En estos días que fui a una de las tantas clínicas de la ciudad en donde habito, para realizar una consulta, me encontré con que al llegar a la recepción no había fila de ningún tipo y la atención inmediata se la ganaba la persona que más gritara. Poniendo en práctica toda la técnica Zen posible, estuve 15 minutos esperando educadamente poder por lo menos, acomodarme frente a la señorita que atendía con el fin de realizarle la consulta, por supuesto, de una manera respetuosa. Cuando estaba cerca, tuvimos un cruce de miradas en el cual ella notó mi molestia y me dijo: ¿En qué le puedo colaborar?, yo la mire, observe a mi alrededor, noté que había dos personas que habían llegado antes que yo y le dije: “ Primero atienda a estas dos personas que han llegado antes que yo y luego si me atiende” inmediatamente las miradas se voltearon sobre mí como el bicho más raro del sitio y enseguida le dije: “De paso mire a ver si organiza bien la fila para no atender primero al que grita más duro”. Ella, contrariada por mis dos respuestas procedió a atender a las dos personas que yo había señalado y luego me atendió con la dulzura característica de una señorita que atiende en una recepción sin ningún tipo de orden ni de fila, es decir: MAL.

Mientras hacia la “fila” o mejor dicho mientras peleaba por llegar al escritorio, pensé lo difícil que es en un país cuyos habitantes no sabemos hacer fila, conseguir la Paz;  más allá de eso, un país en que la gente decente le da miedo sancionar a una persona que se “cola” o se “mete” en una fila sin respetar el orden con el fin de evitarse recibir una mala mirada, un golpe, una puñalada o en el mejor de los casos un insulto. Para evitar este pánico y posiblemente una inesperada visita al hospital no para una consulta sino para una urgencia, me comprometí  a enseñar a mis futuros hijos, sobrinos, amigos, esposa, entre otros, la importancia de hacer una fila, no sólo para subirse a un bus, o realizar una diligencia en el banco sino también en un trancón, en un hospital donde todo el mundo tiene urgencias, en los aeropuertos y en las tiendas. Si los colombianos logramos incorporar este sencillo elemento de convivencia y respeto, seguramente estaremos encaminados a vivir en Paz independientemente de las decisiones que se tomen en la Habana.

Imagine usted la cantidad de dinero que se ahorrarían las empresas eliminando los famosos turnos con su respectivo pito fastidioso, si todo el que llegara a un sitio preguntará quien es el “último” en la fila? acto seguido se sentara a descansar y únicamente estuviera pendiente del “último” en vez de estar pendiente de todos en la fila? Imaginan ustedes los servicios de transporte masivo donde la gente respetara las filas, dejara salir y después entrar, y finalmente saludara a todo el mundo cuando llega a hacer la fila?

Admito que no soy el primero ni el último que ha dicho esto, mi admiración total al profe Mockus por su intento de educar a la población Bogotana y de paso a la Colombiana, yo, el resultado de uno de esos intentos. El respeto y la educación son más importantes que estar pendientes de las personas que están en la Habana discutiendo acuerdos de PAZ, y esto nace de saber hacer una fila para que nos atiendan así sea en una clínica.

DANIEL PEDRAZA ISAZA
paquepaz@gmail.com

¿Y cuando se firme la Paz en la habana, qué?

Por ahora los dejo con la primera entrada de este espacio:

¿Y cuando se firme la Paz en la habana, qué?

Soy Colombiano, Colombia ha sido mi hogar durante mis 30 años de vida, por suerte como dirían algunos, por Dios como dirían otros o por el amor como me gusta pensar a mí; lo cierto es, que viendo que hay una pequeña luz de esperanza de un acuerdo de Paz en Colombia, me he venido preguntando si realmente lo que este país necesita es una firma en la Habana o si por el contrario necesitamos ser consientes que es responsabilidad de todos como ciudadanos colombianos y como sociedad la construcción de la paz, independientemente de lo que suceda en territorio cubano. Más allá de eso me he querido preguntar ¿Y cuando se firme la Paz, QUÉ?

Dejo a ustedes en unas cuantas palabras con mis posibles escenarios:

Primer Escenario: Sorpresivamente la Paz se firma en la Habana el 10 de Octubre del 2013. Las noticias de última hora no se hacen esperar, los periódicos se hacen millonarios con la venta de los informativos “EXTRA”, el país celebra, la gente sale a echar harina, pitos en las calles y uno que otro abrirá una buena botella de licor que tenga en su casa y como buenos apasionados la paz y el partido de la selección Colombia al día siguiente contra Chile serán los temas centrales de conversación.Al día siguiente Colombia gana el partido contra Chile, el país se alegra como nunca antes, la gente celebra se escuchan pitos en las calles y la gran mayoría abrirá la MEJOR botella de licor que tenga en su casa, hablarán del partido, de lo hermoso que se siente volver al mundial después de 16 años y si acaso algunos celebrarán lo bueno que se siente vivir en paz después de más de 60 años, al final, la rumba terminará con una pelea entre amigos, familiares o desconocidos, otros imprudentemente tomarán el volante atropellarán a algún transeúnte desprevenido y ese será el broche de oro de haber firmado la PAZ. Saldo Final 100 muertos, aún así...Colombia ha clasificado al Mundial!

Segundo Escenario: En un gesto de buena voluntad para el fin de año, se firma el acuerdo de paz en la Habana el 23 de Diciembre de 2013 (Aplica también para el 30 de Diciembre): Las noticias de última hora en los noticieros no se hacen esperar , los periódicos se hacen millonarios con la venta de los informativos “EXTRA”, el país celebra y se alegra, como es Lunes (pero al día siguiente solo se trabaja medio día), la gente sale a echar harina, pitos en las calles y uno que otro abrirá una buena botella de licor que tenga en su casa y como buenos apasionados hablaremos de la paz, de la cena de navidad y los regalos del 24, muchos dirán para quedar bien, “que mejor regalo para terminar este año que la PAZ” pero irónicamente siguen sin poder perdonar a su hermano o a su padre, lo cual no importa, el mejor regalo es que unos desconocidos hayan firmado un papel de PAZ, ah! claro y que Colombia irá al mundial! Al final, la reunión terminará con una pelea entre amigos, familiares o desconocidos, otros tomarán imprudentemente el volante en estado de embriaguez y matarán algún transeúnte desprevenido, y ese será el broche de oro de haber firmado la PAZ. Saldo Final 100 muertos.

Tercer Escenario: Después de muchos intentos la Paz se firma en la Habana el 15 de Julio del 2014. los titulares de última hora en los noticieros no se hacen esperar, los periódicos se hacen millonarios con la venta de los informativos “EXTRA”, el país celebra y se siente la alegría en las calles, como es domingo, la gente sale a echar harina, pitos en las calles y uno que otro abrirá una buena botella de licor que tenga en su casa y como buenos apasionados se hablará de la Paz y del milagro que nos hizo la Virgen del Carmen, la cerveza pulula en cada uno de los carros decorados con bombas azules y blancas, dos camiones se estrellan al ver pasar una señorita (seguramente creen que se les apareció la virgen, del Carmen) se bajan, pelean, machete va, machete viene, y ese será el broche de oro de haber firmado la PAZ. Saldo Final 100 muertos.

Cuarto Escenario: Después de muchos intentos la Paz se firma en la Habana el 21 de Enero del 2014. los titulares de última hora en los noticieros no se hacen esperar, los periódicos se hacen millonarios con la venta de los informativos “EXTRA”, el país celebra y la alegría se siente en las calles, como es martes, poca gente saldrá a echar harina, pitos en las calles y uno que otro abrirá una buena botella de licor que tenga en su casa y como buenos apasionados se hablará de la Paz y del milagro que nos ha hecho la Virgen del Carmen, el país se alegra, yo más, tendré el mejor regalo de cumpleaños, ¡la Paz de Colombia!, cambiaré la invitación al Bar que había hecho a mis amigos y los invitaré a salir a las calles y celebrar, en vez de alcohol, tomaremos agua bendita agradeciendo a Dios lo que nos ha ayudado a conseguir, en vez de regalos le diré a los asistentes que traigan tres tamales, (el de cada uno y dos para compartir con alguien) y en vez de cantar el Happy Birthday iremos gritando Paz por toda la ciudad. Ya me imagino que algunos les dará pereza el Plan por que celebrar la Paz no es lo mismo que celebrar mi cumpleaños, celebrar la Paz es aburrido, y me quedaré con algunos pocos cantando y brincando por ahí y dando abrazos a cuanto desprevenido se nos atraviese. Y ese será el broche de oro de haber firmado la PAZ. Saldo Final 0 muertos.

Pase lo que pase señores negociadores por favor, hoy, este humilde servidor les pide que NO firmen la Paz ni el 11 de Octubre, ni el 24 de Diciembre, ni el 31 de Diciembre, ni en las fechas de Brasil 2014, ni en ninguna otra fecha especial para el pueblo colombiano, so pena de que sus delicadas figuras y hechos pasarán a un segundo plano en los informativos nacionales…

Y si nos atrevemos a cambiar las historia, QUÉ? Asumamos que la Paz se firme un día cualquiera (11 de Octubre, el 24 de Diciembre, ó el 31 de Diciembre de 2013) y que el pueblo Colombiano lo celebra durante todo el año siguiente, abrazando al vecino, perdonando al enemigo y dando amor a todos los colombianos, entonces será que habrá que esperar que se firme algo en la Habana? Y aunque suene cliché, yo creo que no, yo creo que la Paz es posible construirla a partir de hoy y en el ahora. Qué pasa si cada uno no pone un granito -o mejor no seamos conformistas- cada uno pone 10 granitos al día de buenas acciones. Así lograremos 10 veces más rápido ser verdaderamente el país más feliz del mundo, pequeñas acciones como llamar a un ser querido y alegrarle el día, dar el puesto a la señora embarazada en el bus, demostrarle amor a nuestras familias, construir desde el hoy y el ahora la Paz que nosotros imaginamos deberíamos tener, así podríamos disfrutar plenamente del mundial 2014 con un saldo total de 0 muertos.

Esté es un espacio de opinión, público, que parte de la base del respeto, para compartir opiniones, visiones y alternativas para la paz. Como ciudadanos colombianos tenemos el deber de apropiarnos del tema y empezar a aportar como dije anteriormente no un granito de arena sino 10, a responsabilizarnos de nuestras acciones, a gozarnos el futbol tanto como la paz, y algún día sentiremos la misma alegría por ir a un mundial que por vivir en Paz

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Para que este Blog?

Bienvenidos a este nuevo espacio de opinión que tratará el tema de cómo construir paz en Colombia?. La tesis principal de este nuevo movimiento es “La Paz de Colombia no se consigue en la Habana”. Es un nuevo espacio de comunicación para lanzar opiniones, soluciones, interrogantes y en general expresarse sobre los diferentes caminos que tenemos como ciudadanos para conseguir la paz en nuestro país.

 

Es importante aclarar, que este espacio no pretende desvirtuar el proceso de Paz que se está llevando a cabo en Cuba,  por el contrario servirá para demostrar a los colombianos desde diferentes puntos de vista y alternativas que el camino hacia la paz empieza por cada uno de nosotros, que la construcción de paz no se reduce a la firma de un acuerdo en la habana ni es responsabilidad de  los 20 seres humanos que se encuentran  hasta el día de hoy negociando la anhelada paz y muchos de los cuales no representan los intereses del pueblo Colombiano.

 

En los siguientes días encontrarán diferentes artículos y escritos referentes a:  

 

·         ¿Y cuando se firme la Paz en la habana, qué?

·         ¿Un país cuyos ciudadanos no saben hacer fila, está preparado para vivir en Paz?

·         ¿ El 85% de los colombianos y las generaciones actuales han vivido y conocido Colombia bajo un escenario de conflicto, si los colombianos no sabemos  ni hemos experimentado que es "vivir en paz" cómo se espera lograr que este sea el nuevo escenario? Cómo se aprende a vivir en paz? Quién nos enseñará?